Un grupo de organizaciones de la sociedad civil destacan el anuncio de la Corporación Financiera Internacional (CFI) del Banco Mundial de que no reanudará las inversiones en escuelas privadas que cobran cuotas por la oferta educativa, tras la publicación de una evaluación del Grupo de Evaluación Independiente (IEG) del Banco Mundial sobre las inversiones de la CFI en este ámbito. En 2020, la CFI instituyó una congelación temporal de todas las inversiones directas e indirectas en escuelas privadas de primaria y secundaria que cobran por la oferta educativa. Tras este anuncio, la congelación se ha ampliado indefinidamente.
Esta decisión refuerza el trabajo de las organizaciones de la sociedad civil que, durante años, han estado vigilando y concienciando sobre el impacto negativo que las escuelas comerciales con y sin ánimo de lucro tienen en la consecución del derecho a una educación de calidad e inclusiva para todos, en particular para los grupos más desfavorecidos y vulnerables – incluyendo a las niñas, los niños y los jóvenes con discapacidad, y todos los grupos históricamente marginados. También refuerza la preocupación por el modo en que operan algunas de estas empresas transnacionales, que se benefician de estas inversiones.
Salima Namusobya, directora ejecutiva de la Iniciativa por los Derechos Sociales y Económicos (ISER) en Uganda dijo: “La educación es un derecho humano, no debe ser tratada como una mercancía o como un medio para generar rendimientos financieros de la inversión en la provisión privada de educación. Todos los niños merecen beneficiarse de una educación de calidad. Celebramos esta decisión de dejar de financiar la educación privada con y sin ánimo de lucro, y esperamos que el Banco Mundial dé prioridad a la financiación de la educación pública”.
Katie Malouf Bous, asesora principal de políticas de Oxfam, dijo: “Este es un gran paso en la dirección correcta para la financiación del desarrollo. Esta evaluación reconoce los posibles efectos nocivos de las inversiones en escuelas privadas de pago con fines de lucro, que corren el riesgo de aumentar las desigualdades en la educación y tienen un impacto negativo en los sistemas escolares públicos. Nos complace que el IEG se haya tomado el tiempo de realizar esta evaluación, y aplaudimos a la CFI por tomarse en serio las conclusiones y demostrar su liderazgo en este tema entre las instituciones financieras.”
Magdalena Sepúlveda, directora ejecutiva de la Iniciativa Global para los Derechos Económicos, Sociales y Culturales, dijo: “Ahora es el momento de que otras instituciones financieras de desarrollo (IFD) tengan en cuenta las conclusiones del IEG, den un paso adelante y sigan el ejemplo de la CFI. También queremos que el Grupo del Banco Mundial dé un giro hacia un mayor apoyo a los gobiernos para construir sistemas de educación pública más fuertes y equitativos, a través de su apoyo al sector público”.
El anuncio de la CFI se publicó en el sitio web del IEG del Banco Mundial el miércoles 8 de junio de 2022, junto con la publicación del informe de evaluación del IEG sobre las inversiones directas e indirectas de la CFI en escuelas privadas desde el jardín de infancia hasta el grado 12 (K-12). En su respuesta a la evaluación, la CFI señaló que la mayoría de las escuelas privadas K-12 son difíciles de invertir directamente, y citó una serie de desafíos con tales inversiones, incluyendo los débiles resultados financieros y el “potencial de las inversiones en las escuelas privadas K-12 para exacerbar las desigualdades y tener efectos indirectos no deseados en el sistema escolar del sector público”.
El anuncio se produce menos de tres meses después de que la CFI indicara que se había desprendido de Bridge International Academies, también conocida como NewGlobe Schools, una cadena de escuelas con fines de lucro que opera en cinco países africanos y en la India. Esto ocurrió después de que se presentaran varias quejas sobre las operaciones de la empresa en Kenia ante el mecanismo de rendición de cuentas de la CFI, el Ombudsman Asesor en materia de Cumplimiento (CAO).
La decisión también está en consonancia con las conclusiones del Informe de Seguimiento de la Educación en el Mundo (GEM) 2021 de la UNESCO, en el que se afirma que “la obtención de beneficios es incompatible con el compromiso de garantizar la gratuidad de la educación preescolar, primaria y secundaria”. La medida de la CFI también es coherente con las decisiones anteriores de la Asociación Mundial para la Educación (GPE) en 2019 y del Parlamento Europeo en 2018, que prohibieron la financiación a las escuelas privadas comerciales con fines de lucro.