A partir de la iniciativa Asunción Resiliente 2022 se seleccionaron cuatro proyectos piloto que contribuyen a construir resiliencia urbana. Es decir, que transforman los desafíos de las ciudades frente al cambio y la incertidumbre global, en oportunidades que garanticen a sus habitantes, el ejercicio pleno de sus derechos, a partir de la tolerancia, la solidaridad y el respeto a la diversidad en todas sus expresiones.

Asunción Resiliente 2022 es un programa de Fundación Avina y Fundación Citi, con el apoyo de MITIC y Fundación Bertoni, que surge con el objetivo de fomentar nuevas acciones estratégicas por medio de la participación del sector privado que brinden apoyo y oportunidades a cámaras de comercio, gremios, grupos asociativos de MIPyME que propongan soluciones en el marco de la economía circular y el uso eficiente de recursos y que contribuyan a la resiliencia de la ciudad de Asunción.

Las propuestas seleccionadas son: Ecocur, Granopar, EV Mobility y Marusa. Las cuatro recibirán un capital semilla y asistencia técnica.

Ecocur es una empresa que recupera neumáticos fuera de uso para la fabricación de baldosas. “Cada año, cerca de 1000 millones de neumáticos llegan al final de su vida útil en todo el mundo. Su masiva fabricación y la gran dificultad para hacerlos desaparecer representan un gran problema ambiental. Un neumático necesita mucha energía para ser fabricado y si no es reciclado, provoca una gran contaminación ambiental en su degradación, al terminar abandonado en la naturaleza, este proceso puede tardar hasta mil años. Esto produce un grave impacto, ya que con el paso del tiempo se produce una degradación química parcial que contamina el suelo. Adicionalmente al eliminar uno de los mayores criaderos del aedes aegypti, combate a una de las epidemias más grandes hace años “el dengue” y el agente transmisor del “zica” y “chikungunya”. Siendo Paraguay un país que epidemiológicamente se considera endémico para algunas arbovirosis”, cuenta Sebastián Maffei, cofundador de Ecocur.

El emprendimiento propone mejorar su proceso productivo mediante la instalación de un software que le permita ser más eficiente en su producción, ampliar su gama de productos introduciendo nuevos desarrollos para el sector de la construcción y eliminar el uso de sustancias químicas mediante su reemplazo por sustancias producidas en base a la química verde. “Tenemos más de 5.100 metros cuadrados vendidos ya colocados y este mes vamos a cerrar nuestra primera exportación a Argentina justamente de 1.200 metros cuadrados”, dice Maffei.

Granopar es una empresa familiar que se dedica a la elaboración de harinas de maíz cocinada y varios productos derivados congelados, listos para hornear de consumo masivo.  Dentro del proceso de elaboración de la harina de maíz cocinada, se genera un subproducto que es el mosto de maíz, este mosto es un desperdicio con un alto contenido de nutrientes que son vertidos a la red cloacal. El hijo del fundador, Ángel Garcete cuenta que el objetivo de la propuesta es el aprovechamiento del mosto mediante la recolección en tanques de almacenamiento y decantación de los nutrientes para luego aprovecharlo como alimento animal para cerdos o vacunos.

EV Mobility nació en 2019 y propone transformar vehículos de combustión en eléctricos. El objetivo es descarbonizar, digitalizar y automatizar el transporte urbano. “La movilidad eléctrica en el transporte permite generar un cambio respecto de las emisiones”, señala José Carlos Ramirez, referente del emprendimiento.

Marusa es una empresa que se dedica diseño, fabricación y comercialización de artículos de cuero. En esta etapa, está trabajando en el desarrollo de un nuevo tipo de cuero vegano. Se opta por las hojas de maíz como materia prima para la elaboración del cuero. “Iniciamos con maíz, pero también queremos utilizar el mango. Estamos armando el prototipo”, dice Maura Marti, emprendedora.