Desde hace varios años, Haití se enfrenta una crisis política y económica de gran envergadura. La escalada de violencia en la región, principalmente en la capital, Puerto Príncipe, impide que un gran número de personas reciban una asistencia médica de calidad. En el último tiempo, la situación humanitaria en el país se ha vuelto preocupante. Los enfrentamientos armados se han encrudecido, extendiéndose de forma alarmante por todos los barrios de la capital haitiana.

Sumado al escenario conflictivo que se experimenta alrededor del país, el número de casos de cólera aumenta a un ritmo alarmante. El resurgimiento y la propagación de la enfermedad es síntoma de una situación humanitaria y sanitaria catastrófica: la falta de acceso a agua potable se ha vuelto una constante en la región, al igual que la imposibilidad de los locales de acceder a los tratamientos adecuados para la enfermedad.

Frente a este urgente escenario, los equipos médicos de Médicos Sin Fronteras (MSF) trabajan en diferentes puntos de la región asistiendo a las personas afectadas por la violencia urbana a través de clínicas móviles y centros de urgencia. También gestionan dos clínicas para supervivientes de violencia sexual y de género donde capacitan al personal médico en la materia y trabajan con organizaciones locales para sensibilizar sobre la violencia sexual y los problemas de salud sexual de los adolescentes.

En 2022, los equipos en el país, en colaboración con el Ministerio de Salud, realizaron: más de 4.600 cirugías; 34.200 consultas de emergencia; 17.800 consultas en clínicas móviles; trataron 2.600 personas con heridas de bala, 370 personas con quemaduras y 2.300 personas por violencia sexual; y brindaron atención durante 700 partos.

Claudia, enfermera supervisora del Centro de Emergencias de Turgeau, en Puerto Príncipe describe cómo su equipo presta una atención médica vital en medio de la inseguridad generalizada y las dificultades económicas. “El acceso a la atención sanitaria en Puerto Príncipe es difícil, y el coste de la atención sanitaria es elevado. Cuando los pacientes llegan a nuestro centro de urgencias de Turgeau, saben que van a recibir atención gratuita y de alta calidad. Es mucho trabajo, pero también es una motivación para que el equipo se mantenga unido para ayudarles y apoyarles”.