El acceso al agua potable es un factor fundamental para garantizar la higiene y la salud, particularmente en un contexto de pandemia. A su vez, la crisis climática (sequías e inundaciones) pone en peligro el suministro de agua, especialmente para los más vulnerables.

A través de la alianza de Fundación Avina con Xylem Watermark, Manchester City Fundación Fútbol, ​​Puma y con el apoyo de organizaciones en Brasil (Fundação Gol de Letra e Instituto Favela da Paz) y en Argentina (I Love Futbol, Revolución Pelota y Sumando) se generó un proyecto que desea incrementar y mejorar el acceso al agua potable mediante la introducción de soluciones tecnológicas apropiadas que ayudarán a mejorar la salud y la nutrición, además de fortalecer las capacidades de la comunidad para la gestión de la calidad del agua y mejorar hábitos de higiene en los barrios de La Cava en Argentina y Vila Albertina en Brasil.

“En Brasil tuvimos la primera actividad el 27 noviembre con la presencia de voluntarios de Xylem, Puma y miembros del fan club de Manchester. La misma consistió en la construcción de un huerto vertical con sistema de energía solar de bajo costo que mejorará la alimentación de 511 alumnos, maestros y profesionales que trabajan en el centro de la Fundação Gol de Letra. La próxima actividad será la instalación del sistema de captación de agua de lluvia para apoyar la limpieza del centro”, explica Fernanda Ferreira, coordinadora programática de Fundación Avina.

En el caso de Argentina, se trabajó en el centro de Revolución Pelota, el cual recibe niños, niñas y jóvenes que meriendan y realizan distintas actividades como, por ejemplo, clases de arte, fotografía, fútbol y hockey, entre otras. La principal problemática en La Cava es la calidad del agua. Esta situación genera gastos adicionales en el centro que debe comprar agua embotellada para brindar a las personas que asisten a las distintas actividades que se realizan. Adicionalmente, otra problemática identificada es la vinculada a los hábitos de higiene y su vínculo con la salud. Se observa que no está instalado en los niños y jóvenes el hábito de higienizar las manos luego de las actividades y antes de comer.

“Durante la primera jornada se realizaron talleres prácticos para niños con papel compostable con semillas y con jóvenes sobre el reciclaje de aceite de cocina. La segunda jornada contó con la participación de voluntarios de Xylem y se conversó con niños, jóvenes y adultos sobre la importancia de la calidad del agua. Se realizó un taller práctico para realizar filtros de agua caseros y se instaló un filtro en la cocina del centro de Revolución Pelota. En el próximo encuentro se realizará la instalación del módulo de lavado de manos de plástico reciclado. Se espera que estas actividades generen beneficios para más de 150 niños y jóvenes que visitan el centro de Revolución Pelota y sus familias”, dice Paz González, Consultora de Fundación Avina.